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| ¡Tercera posición en la TriNeu GoreTex de Canillo! |
Otro pódium más para casa, esta
vez formando equipo de relevos con Uri Barbany y Fernando López de Sagredo, dos
cracks del triatlón. Y es que el sábado nos subimos al tercer cajón del pódium
de la TriNeu GoreTex de Canillo, una competición diferente a todas las que hay
en el calendario. No es un triatlón de invierno o blanco ya que combinaba
carrera a pié, mountain bike y esquí de montaña. Desde triATLETAS en RED me
dieron la posibilidad de participar y acudí sin pensarlo dos veces, a pesar de
que se disputaba en Andorra y no tuvimos claro el transporte hasta última hora.
Pero sin duda que la experiencia valió la pena.
La carrera empezaba a las tres
del mediodía, pero al ser en Andorra, tocaba madrugar y pasar más de tres horas
en el coche. Recogimos los dorsales en el Palau de Gel de Canillo y nos fuimos
a la Plaza Carlemany para dejar todo el material en las zonas de transición.
Competíamos por equipos, así que cada uno haría una modalidad: me tocaba
empezar corriendo, para que luego Fernan fuera en bici y acabara Uri con el
esquí de montaña. Todo el circuito sumaba casi 1300 metros de desnivel
positivo, una barbaridad para hacerlo en solitario. Y por equipos sabíamos que podíamos
tener opciones de optar a pódium.
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| Fer, yo y Uri antes de la salida |
Con el frío que hacía y la
intermitente caída de copos de nieve, hacer un buen calentamiento y ponerse una
térmica, era la mejor opción. Así que una vez el tema logístico estaba
solucionado, nos fuimos a calentar Fernan y yo. Él con la bici a hacer el
recorrido de subida hasta la zona de transición y yo a dar una vuelta de
reconocimiento al circuito de carrera a pié que discurría por las calles de
Canillo. La verdad es que las sensaciones eran muy buenas, pero los circuitos
eran muy duros y rompe piernas.
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| Instantes antes de la salida, nervios y más nervios... |
Me situé en la línea de salida.
Empezaba yo corriendo y la verdad es que me sorprendió ver tan pocos corredores.
Resultó al final que habían casi 40 inscritos individuales y 14 equipos de tres
corredores. Era factible hacer pódium. En los individuales competían Miguel
Caballero y Agustí Roc, dos bestias de la montaña.
Tras el disparo de salida, empezaron
marcando un ritmo muy rápido y a pocos metros de la salida el grupo ya estaba
bastante dividido. Además, al empezar la carrera teníamos que pasar por un
tramo muy estrecho hasta llegar a la carretera ancha. El inicio no tenía mucho
desnivel, por lo que intenté seguir un ritmo fuerte, consciente de que luego
tocaría subir por las empinadas calles de Canillo. Fue allí donde todos
sufrimos un recorrido que con tanta subida y bajada parecía una montaña rusa. Los
dos primeros que también competían en relevos como nosotros, tenían un ritmo
muy alto, inalcanzable para mí. La primera vuelta la pasé en tercera posición
pero tenía al cuarto bastante cerca y me había cascado mucho en los primeros
3,2 kilómetros.
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| Una de las rampas de bajada por el pueblo... |
Así que el objetivo era mantener
la tercera posición antes de dar el relevo a Fernan, que haría el tramo de
mountain bike. Pero, joder, en el tramo del pueblo y con unos rampotes del
copón, me pasó el que hasta entonces iba cuarto. Por detrás venía una chica,
que su equipo bonificaba en el tiempo por tener a una fémina en el relevo de
correr, por lo que me dije a mí mismo que no me pasaría. Intente exprimirme a
fondo en las últimas subidas y bajadas antes de llegar al último kilómetro que
era llano en paralelo al río antes de llegar a la transición.
Entré con un tiempo de 24’ 40”,
que la verdad no está mal en un tramo de más de 6 kilómetros muy rompe piernas
por las subidas y bajadas intercaladas que impedían mantener un ritmo constante.
Fernan cogió la bici en la cuarta posición por equipos y después de adelantar a
uno de los participantes de relevos, empezó la subida de 8 kilómetros y 500
metros de desnivel, una barbaridad. Desde el primer kilómetro enganchado a otro
participante y subiendo a unos ritmos brutales, que después de 22 minutos
largos, le llevaron a la zona de transición donde esperaba Uri con los esquís.
Con el parcial de Fer habíamos recuperado la tercera posición y estábamos enganchados
al segundo.
Ahí empezaba Uri, con un
circuito de poco más de 2,5 kilómetros pero con 500 metros de desnivel y un
recorrido que habían modificado por la cantidad de nieve acumulada en el
bosque. Siempre tirando, y sin tener un relevo del otro corredor, subieron por
las empinadas laderas que llevan hasta el Pic de la Portella. En los últimos
metros la distancia con el primer clasificado se iba reduciendo, pero sin
posibilidad de alcanzarlo. Al final, y tras un último ataque, el equipo de
triATLETAS en RED entró en ¡tercera posición absoluta por equipos!
Las sensaciones eran de
satisfacción, ya que los otros dos equipos habían ido bastante fuertes en las
tres disciplinas. Pero la moraleja que saco yo, es que ¡tengo que entrenar
mucho más para estar a la altura de Uri
y Fer jajaja! Y con esa idea, tenemos intención de volver el año que viene. La
ceremonia de pódium se hizo un poco larga, pero acompañada de un chocolate
caliente se hizo más llevadera. Nos llevamos a casa unos guantes GoreTex de
running bastante chulos y un diploma, pero volvimos con muchas ganas de seguir
entrenando duro y en 2014 volver para dar mucha más guerra y… ¡ganar!
¡Vamos!
Pablo
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